La libertad no consiste en abrazar la doctrina adecuada sino en desasirse de todas ellas

lunes, 24 de junio de 2019

MIRAR EL CÉNTIMO




La cuenta suma 3,05. Le doy a la china un billete de 5 y cuatro céntimos que recaudo del fondo del monedero, así ella no tendrá que desprenderse de cambio y no me largará un puñado de chatarra.

-No, no –protesta– yo cambio.

Sonrío sorprendida y comento:

-Oriente es Oriente y Occidente, Occidente.

Ella devuelve, ampliada, la sonrisa y sentencia:

-Chi, chi, Oliente es Oliente y Ochidente, Ochidente, chi, chi.

Le devuelvo una moneda de 5 céntimos (de las que me ha dado) a modo de propina o, más bien,  para dejar claro que no quería robarle un céntimo y vuelve a protestar, aunque pronto la hace desaparecer en el cajón.

-Chi, chi, Oliente es Oliente y Ochidente, Ochidente, chi, chi. (Carcajada, de Fumanchú, me ha parecido)










No hay comentarios:

Publicar un comentario