La libertad no consiste en abrazar la doctrina adecuada sino en desasirse de todas ellas

martes, 3 de diciembre de 2019

PARADOJA



–¿Eres negacionista?

+¿De qué?

–De eso que no hay que negar

–No


(Cumbre del Clima)




lunes, 2 de diciembre de 2019

LAS REDES NO SON PAIS PARA EQUIDISTANTES





En una sociedad polarizada como la nuestra a quien intente escapar de alguna trinchera le lloverán los tiros desde ambas. Así esbozada, esta afirmación parece una hipérbole y probablemente lo sea. Al fin y al cabo, nos evadimos de la realidad tangible enredándonos en la virtualidad, donde las guerras no son sino videojuegos o cruce de palabras en los que la sangre, en efecto, no llegará al río. Por lo menos no de inmediato.



A resguardo del verdadero plomo, nos escupimos consignas aprendidas, no digo asimiladas porque para asimilar hay que, previamente, haber hecho digestión, todo un proceso con sus fases. Valerse de consignas no es sino masticar chicle y hacer pompas con él. Cuando termina el saborizante se desecha y se estrena otra dosis de igual grato sabor.



En esa escisión entre polos hay un terreno de nadie donde deambulan los equidistantes que aún no se han desplomado ante el cruce de balas.



La equidistancia, digámoslo ya sin rodeos, está muy mal vista. Y no es que tenga mala prensa, es que carece por entero de predicamento, salvo para ocupar alguna frase de desdén o descalificación, con la que al equidistante se le infiere cobardía, falta de luces o de carácter y determinación. No niego que exista quien, amparándose en ella, adopte una postura maleable y acomodaticia, que le permita escurrir el bulto para obtener la simpatía de todos o no confrontar con nadie. Si el fin es obtener réditos de alguna especie, más que equidistantes se les definiría mejor como veletas o chaqueteros, simuladores o camaleones. 



Hay, sin embargo, una equidistancia decididamente incómoda para quien la adopta, y es la de quienes no conformándose con las respuestas suministradas por los polos enfrentados busca otras, a menudo rompiendo marcos o tratando de escapar de ellos.  No me pregunten por qué, pero hay sujetos inconformistas, escépticos, buscadores de verdades anegados de dudas, cuyas conclusiones, de alcanzar alguna, suelen ser provisionales. Para ellos, tener razón, llevarse el gato al agua o la perra gorda no es fundamental, sí lo es indagar, buscar en el forro de la prenda más que embutirse en ella. Que sean vistos como inadaptados o moscacojoneros depende del grado de adaptación o de fanatismo de su interlocutor. Por lo general, no gozan de gran aceptación ni popularidad porque a pocos agrada que sus convicciones sean cuestionadas, sobre todo cuando éstas no son rechazadas de plano, como sucede cuando, situados en un polo, se es confrontado por el otro, lo que a menudo sirve de refuerzo a las propias posiciones.



El equidistante, así como no asume una doctrina en su conjunto, no suele hacer descarte a la totalidad, por lo que acostumbra a mostrar asentimientos o disentimientos parciales, se demora en matices, deja cabos sueltos e incluso manifiesta abiertamente su desconocimiento sobre una materia. De ese modo, antes o después acabará irritando a aquel que se posiciona sin ambages en un polo, quien sólo busca tener razón, bien sea arropándose en los suyos o confrontándose con el oponente. 



El equidistante es rara avis, sobre todo en las redes, que no son sino un sucedáneo de vida social. En ellas no podemos ser personas con todos los atributos, sino tan sólo con aquello que dejamos entrever en nuestras publicaciones y que, también, el otro percibe de forma fragmentaria. Los posicionamientos ideológicos se ven de esta forma enfatizados, pues ningún emoticono puede sustituir el lenguaje gestual, ni se percibe el tono de una voz, nada que matice unas opiniones que aparecen rotundas como pancartas reivindicativas. A menudo nos va la vida virtual en lo que proclamamos con tanto énfasis. Por eso el encono, la suspicacia y la susceptibilidad es el caldo en el que bullen nuestros "hilos". Dudar o matizar se convierte en una afrenta entre perfiles o avatares, que no entre personas.



Cada uno suele asimilar su página a la sala de estar de su propia casa, entrar en casa ajena para debatir la publicación del anfitrión se dificulta, incluso cuando las observaciones que se realizan partan de una necesidad genuina de comunicación. Muy rara vez nos damos permiso para hacerlo, y si alguna vez lo hacemos es muy probable que no agrade al dueño del lugar. 



Al equidistante le gusta el debate, la matización, mirar desde diferentes ángulos los asuntos, y sabe que para ello necesita del punto de vista ajeno. A menos que logre crear en su página el ambiente propicio, tendrá que autocensurarse de forma habitual o ir perdiendo agregados.  



Pese a que las redes configuran una buena parte de nuestro tiempo de ocio desde hace una década no están demostrando ser un vehículo eficiente para una comunicación genuina entre personas.



No son, tampoco, lugar para equidistancias, sino una especie de patio de recreo donde reina el griterío o el mero exhibicionismo en busca de aprobación acrítica.










DIALOGO DE BESUGOS IV


(CORRUPCIÓN DE PARTIDOS)

–Tu corrupción es peor que la mía

–¿Por qué? Yo he birlao menos dinero

–Pero has financiado a tu partido

–Y tú ¿a quién has "financiado" tú? 

–Pshheee,.. como el Gordo de Navidad...que está muy repartío, yo no tengo ná…el dinero público no es de nadie..

–Pues eso, que por lo menos sea de alguien, ¿no? 

–Vaaaale, pero que siga pareciendo como que tú y yo nos peleamos...



UN PASEO POR EL FACEBOOK



Junto a anuncios que prometen la felicidad mediante un curso de "amor incondicional" (a pagar en módicas cuotas), ofertas variadas bajo el epígrafe "blackfriday" y cremas regenerantes de las patas de gallo, en la red social más concurrida puedes hallar opiniones que simplifican en un paso o dos la complejidad del mundo y lo convierten, mientras el time line las exhibe, en una papilla digerible. De este modo puedes entrever que la culpa de todo lo que acontece en Hispanoamérica es del chavismo tanto donde gobierna como donde no. Que la herencia de Franco consistió en unos milloncejos a sus familiares y no en una monarquía de partidos. Que un gobierno en funciones no funciona porque la gente vota mal, pero gracias a que el chavismo va a coaligarse con el partido en el gobierno todos vamos a ser tan felices como si por fin nos hubiéramos matriculado en el curso de "amor incondicional". La militancia de los partidos progres no puede equivocarse porque el afán que la empuja es el bien de la humanidad y no dádiva alguna ni pasada ni presente ni por venir, en eso es donde se advierte que son la mar de anticapitalistas y tal. 


Que el Estado es opresor sólo en Cataluña, según los catalanistas, pero no lo suficientemente opresor para enviar los tanques a las ramblas y así servirles como victoria victimista, de manera que tendrán que seguir cortando carreteras hasta alcanzar el Estado Catalán, ese sí, tan liberador. 


La corrupción es un crimen cuando la ejerce el oponente, lo nuestro es, como mucho, despiste, dan a entender los de la rosa en el puño. A nadie mientras tanto se le ocurre escrachar las sedes del partido que ha desviado fondos públicos a bolsillos particulares ni pedir dimisiones,  ni mucho menos mociones de censura, pero sí gritar "fachas" y "machistas" a quienes han votado tan mal, tan mal, que esto no parece una democracia del primer mundo, oiga, como cuando éramos europeos sin amenazas de Brexit. 


Personalmente me alegra mucho que exista esta red social, ¡tan apañada que es para entender el mundo! Antes de que existiera todo era caótico e inextricable, no como ahora. 






ABSTENCIÓN CONSCIENTE




Las etiquetas creadas por la propaganda, tales como "facha" (entre otras), son creadas deliberadamente para alejar a la ciudadanía de la realidad, es decir, de aquello que acontece, de los hechos en sí, y no del "relato" de los hechos. Suponen "atajos" por los que conducirse y no tendrían éxito sin la connivencia del abrumado ciudadano que opta por la simplificación que aportan en lugar de enfrentar las complejidades de la cruda realidad. Sin predisposición al autoengaño ningún engaño tendría éxito, pero lo cierto es que las siglas políticas –éstas o aquellas– logran embaucar a muchos, a demasiados todavía. 



La lucha de siglas no me interesa, no me mueve ni me conmueve, desde hace tiempo la percepción de los hechos (no el "relato" elaborado) me conduce a planteamientos que no figuran en la agenda de ninguna sigla ni institución. Debemos encarar graves problemas que se harán más acuciantes cuanto más dilatemos afrontarlos. Más allá de la inminencia de una nueva crisis económica, las condiciones cada vez más penosas del mercado de trabajo, la esquilmación de recursos naturales, etc (hechos todos que acontecen a nivel global) contamos, además, con conflictos a nivel nacional. La polarización –azuzada desde el sistema de poder– de nacionalismos rampantes que sirven de vehículo a las frustraciones de la desorientada ciudadanía, han creado problemas de convivencia, sí, pero la convivencia está dañada, y quizá a niveles irrecuperables, de muchas otras formas. 



Muchos de nuestros amigos, conocidos, familiares o vecinos, malviven con ayudas institucionales porque no logran reincorporarse al mercado de trabajo  o son explotados inmisericordemente encadenando contratos precarios ¿Nos preocupamos de sus angustias si éstas no nos tocan de lleno? ¿Somos nosotros mismos los que sufrimos calladamente y mordiéndonos las entrañas en el disimulo los que malvivimos con penuria y con vergüenza y hasta con culpabilidad por no poder alcanzar el nivel de consumo del pariente o el vecino porque  llenar el frigorífico supone en sí una odisea? 



Quienes ostentan el poder (y, recordemos, el poder no sólo es poder político sino poder económico) o aspiran a ello no comparten, en ningún caso, las inquietudes ciertas de aquellos que sólo cuentan con un currículum laboral en competencia con muchos otros. El poder y sus gestores aspiran a perpetuarse y lo logran con toda la maquinaria que poseen, con su uso y abuso inmisericorde. 



Si hay bandos ciertos son dos: el de aquellos que deciden y aquellos que no deciden por más que se les haga creer que sí, que con papeletas en urnas pueden decidir, lo que la observación desapasionada de la realidad desmiente ¿O no constatamos que gane quien gane en el recuento de votos nada sustancial cambia y que tan sólo cambian las maneras, tantas veces impostadas, de  ejercer el poder? Pero preferimos chapotear en la superficie, nos da miedo hurgar en las raíces porque hacerlo nos conduciría a una toma de decisiones y éstas implicarían, inevitablemente, la confraternización, la solidaridad, la mutualidad, desbaratar las barreras que nos han creado artificialmente, identitarismos exacerbados de todo pelaje que cumplen con la misión encomendada desde el poder que los sustenta y azuza. 



Debemos empezar reconociendo que nos vencen porque han logrado dividirnos, porque si no aceptáramos las divisiones de género, de raza, de orientación sexual, etc, tan instrumentalizadas, si lográramos la unión entre los más numerosos (esos que alimentan los montones de currículums en competencia)  las cúspides se tambalerarían. 



No se trata de pergeñar revoluciones que implican derramamientos de sangre dado que éstas culminan siempre con nuevos capitanes al mando. Se trata de unirnos para decidir verdaderamente sobre nuestras vidas, para auto organizarnos, conscientes de que ello exige un esfuerzo constante. Nada de esto sucederá, lo sabemos, mientras nos dejemos conducir como ganado. Mientras prefiramos creernos la ficción con la que nos embaucan.



He dicho que los más numerosos no podemos verdaderamente decidir pero esto no es del todo exacto, hay una decisión que sí está a nuestro alcance pero que rebasa la individualidad, que implica la cooperación, y es no consentir. No votar es no consentir, la abstención consciente supone lanzar un mensaje de disconformidad, supone un desistimiento, que hagan falta más desistimientos, más disconformidad que tan sólo esa,  no la hace inútil, toda inmovilidad se rompe con un primer paso. 












VOTACIONES



Consciente de la importancia de las inminentes votaciones, la comunidad de vecinos decidió instalar una papelera junto a los buzones de la vecindad, hasta ayer la participación alcanzó un índice elevadísimo #semosmudemocraticos, hoy la limpiadora custodió el recipiente rebosante hasta el contenedor de reciclado de papel #calmateGreta. La #fiestadelademocracia consiste en introducir papeletas por ranuras. Cuando los políticos hablan de "higiene democrática", deben referirse a que después de los comicios sustituyen los rollos por las papeletas para limpiarse #ranuraencallecida #botabotamipelota #quemequitenlobotao



DIALOGO DE BESUGOS III



(MANIFIESTO DE INTELECTUALES)



–Hola, qué tal, ¿Cómo estás? Que, esto...que soy Almudena

+¿Qué Almudena, La Grande?

–Sí, la más grande

+¿Pero esa no era la Jurado?

–Te llamo porque…

+Sí, lo sé, hay que hacer un gobierno de progreso, ¿Tienes el manifiesto?

–Te lo envío al email

+No importa, confío en tí ¿Dónde hay que firmar? ¿Lo han firmado ya los Bardenes?

–Por supuesto

+¡Qué sería de este país sin los intelectuales comprometidos!

–Cierto, tenemos una gran responsabilidad

+Sin nosotros volvería el franquismo, por cierto urge sacar del valle al patas cortas, ¿Lo has especificado en el texto?

–Es que…

+Es que…¡Nada! ¡No valen excusas, Almudena! Pedro nos prometió…

–Sí, pero es que, el problema es la familia

+Que se lo lleven al Pazo

–No, que van a tramitar la devolución, también

+Pues, al Pardo, a la Almudena a…

–¿A mí? ¡De eso ni hablar! ¡No tengo habitación de invitados, voy a tener para momias!

+Almudena, me refería a la catedral, eres Grande pero un poco…

–Bueno, mira, no me líes, que aún me quedan llamadas, quiero al menos 200 firmas

+La próxima vez abre un grupo de WhatsApp, mujer, que parece mentira, con lo práctico que es: grupo de WhatsApp "Los abajo firmantes" así de fácil, con archivo de manifiestos y copia y pega

–Pues, mira, muy bien pensado

+Es que por algo soy pensador y no novelista

–Bueno, qué importa la especialidad, el caso es que somos intelectuales

+Comprometidos

–Muy comprometidos y con una gran responsabilidad con el futuro del país

+De progreso, un futuro de progreso

–¡Ayns, qué Grandes somos! ¡Por lo menos, yo! Ha, ha, ha, haaaa







AMOR CONCRETO



El amor como tal no puede darse en abstracto sino en lo particular. Esas pomposas declaraciones de amor a la humanidad son propias de teologías (religiosas o políticas) que conducen a la deshumanización y a la devastación. O amas al prójimo o no amas en absoluto, otra cosa es el cuento del buenismo,  tan rentable para descargos de conciencia vía limosnas a la salida del templo u ONGs.

DIALOGO DE BESUGOS II






–Me gustaría vivir más al norte 

+¿Así como en Asturias?

–No, el Norte, Norte, donde la gente es civilizada.

+¡Ah, sí!, te refieres a esa gente que recicla y vota plebiscitos y se ponen como gambas a la plancha cuando asoma el sol

–Tienen una sociedad más avanzada

+Bueno, el Ikea también está aquí, si es por eso…

–La gente no habla a gritos, ni tiran papeles al suelo

+Socialdemocracia a la escandinava 

–Pero como los escandinavos, que conste, no como los de aquí

+Pagan muchos impuestos

–Pero no roban ni estafan

+No los llames escandinavos llámales santos

–Hay sueldos, bienestar, servicios públicos, para todos…

+Hace frío

–No jodas, en julio y en Écija

+Digo allí, con los escandinavos esos

–Eres un aguafiestas, un descreído, un escéptico y si me apuras hasta eres nihilista y todo

+No, lo que pasa es que las utopías han muerto, Manolo

–Depende. Una verdadera socialdemocracia no es un comunismo ni un nazionalsocialismo, ni hacen falta revoluciones 

+No, claro, todo limpio y pulido, el paraíso en cómodos fascículos, no te jode

–Es la mentalidad, la mentalidad de los escandinavos, es diferente…

+Pero qué perra te ha dado con los escandinavos. Si tú  eres de Centro, o de extremo Centro 

–Ya no, me han decepcionado, son como los otros que ya había ido votando anteriormente

+¿Los morados o los verdes?( ¡Vaya, como las aceitunas, moradas o verdes, pero siempre aliñadas…!)

–Allí hay bienestar y eso

+"Eso" se llama frío, y no me refiero al clima

–Pues digas tú lo que digas los escandinavos lo hacen bien, que eres un cenizo

+Mira, Manolo, no es por tocarte los escandinavos, pero…

–¿Pero qué?

–Na, que eres...mu buena gente




EL MUNDO SE ESTÁ VOLVIENDO INCOMPRENSIBLE




Ahora resulta que a los liberales, que son muy liberales y mucho liberales,  les ha dado por llamarse "libertarios". Pero vamos a ver ¿Esto qué es? ¡Libertarios siempre han sido los anarquistas! ¡Qué ganas de confundir a la peña! Claro que, los que se definen como anarquistas, tampoco lo son, que son cuatro perroflautas ahí en una okupa donde, por cierto, ellas los canean a ellos por machirulos opresores, bim bam, bim bam a hostia limpia ¡moraos, los han dejao! como si sus compañeros fueran, qué se yo, banqueros o el rey León (querido face –dos puntos :– ya has visto que he censurado el nombre del monarca, de nada).

Pues que esto de las definiciones políticas ya no es lo que era, así que aquí o todos fachas o todos cristianos, ¡Moros, no! ¡Moros no somos ninguno porque esa palabra está muy mal vista, es muy antigua, y muy viejuna! Así que ya no se puede decir "hay moros en la costa" aunque estés remojándote los juanetes en Barbate y llegue una patera. Qué le vamos a hacer, hay que ser modernos o mejor posmodernos que es como ser modernos pero con el pelo teñido mitad naranja mitad azul (como el boli bic de la EGB, que el naranja pintaba fino, y el azul pintaba normal). Pero bueno de las pintas no hablemos, que eso... mejor hablemos de lenguaje in©lusivx, para no ofender, porque yo no quiero ofender (¿me has leído no, Zoqueterg?) ¿Ustedes quieren ofender? ¡Aquí nadie quiere ofender! Además todos somos fachas en un momento dado, ¿o no? basta con que otro te lo diga, así como escupiéndote a la cara, pero con emoticonos  o con gifs, o con algún meme, que los hay, o con el clásico "facha de mierda" mismo, que es más castizo y màs directo.  

Pero es que ya ni los fachas son lo que eran. Aquellas cancioncillas de Cara al sol, de las abuelas que tu decías "pues mira, yaya, para haber estado tanto tiempo cara al sol no estás ni arrugada, ¿Eh?" Es que los cutis de antes no son como los de ahora, tanto bótox, tanto bótox, que algunas parecen que se han pegado una leche con la puerta del armario que sí la ve la yaya le pone un filete creyendo que es un chichón y no una ceja turgente. 

El mundo se está volviendo incomprensible nada es lo que era ¡Ay, si la yaya levantara la cabeza!





LO PROGRE Y LO LIBERAL



Me aburre tanto lo "progre" como lo de aquellos que, huyendo del progre-correctismo, abrazan sin mesura una nueva minipandi guay liberal que lo flipan con papuchi y sus emprendedurías. El polo Ralph Lauren es lo de menos, apestan a colonia cara y a saberselas todas pero de oídas, sin darle palo al agua, mucho máster, mucho máster, eh, eh. 
Como el Rallo ese que aparece por las ventanas de los internetses, y me parece, francamente, el rollo que no cesa.



lunes, 24 de junio de 2019

DIÁLOGO DE BESUGOS





–Le veo morado, ¿Es grave, doctor Sánchez?

+¡Quítese las gafas y apague el canuto!

–Sin las gafas pierdo la perspectiva y degenero

+Quiero que aprecie mi after shave con nanoparticulas hialurónicas, estoy barajando presentar mi candidatura a mister universo

–Bien pensado, como máster del universo no necesitará respaldos

+No se confunda, lo mío no es un máster sino un doctorado, todavía hay clases

–Ah, si es porque no se ha acabado el curso…

+No puede acabar hasta que me invistan

–Si le invitan, tómese una a mi salud y a la suya...sigo viéndole morado, necesitará una píldora, se la doro, vuelta y vuelta ¿O prefiere un supositorio?

+Supone mal, no estoy enfermo, colóquese detrás del espejo, no me interesan sus suposiciones, debo contemplarme

–Me colocaría pero he apagado el canuto, mis posiciones,   aburridas, como le tengo dicho a la Mari, que no innovamos, chata…

+No me hable de oposiciones, los pactos prosperan, están a mi disposición

–Pues eso, haga una deposición, aunque sea transitoria…

–...









FEMINAZIS




Si rebates a una femilila te llama facha, pero si la llamas feminazi te manda leer. Y vas y lees, sobre el nazismo, pongamos por caso,  y así es como te rearfirmas. Pero mientras tanto la feminazi se ha largao a hacer una performance o a cumplir con su agenda de linchamientos. Así que tienes que seguir leyendo y así es cómo llegas a la S de Scum o a una tal Workin. Pero si no estás para mucha complicación tiras de titular de prensa y te das de frente con Carmena o Carmen Calvo, nuestro producto interior bruto. Que aquí importar ideas importamos (sobre todo las malas) pero si se trata de mala idea lo petamos en autarquía. También tenemos a Carmen Montón (no digo de qué es el montón, lo dejo a la libre imaginación del informado lector) ¿Y Adriana Lastra o era Lastre? Vamos a dejarlo en tablas: Lastr@, o le añadimos una incógnita Lastrx.  

Y con esto y un bizcocho ...me aprieta la talla treinta y ocho. Rompan filas. ¡Heil, Calvo!










EL AGUA Y EL ACEITE






Las opiniones vertidas en redes sobre el caso #manada están enconadas en dos polos (¡Qué sorpresa!). En uno (polo A) predomina la "fe" y la emocionalidad exacerbada con expresiones que oscilan entre el "hermana yo sí te creo" de ellas y el "¡Violadores! Violadores!" de ellos.



En el otro polo (polo B) se sitúan quienes, careciendo de "fe", y por tanto transidos de dudas razonables (¿O es que no es razonable desconfiar de las orquestaciones mediáticas? Y sobre todo de la sospechosa unanimidad no sólo entre los medios sino de éstos con los poderes ejecutivo, legislativo, y ahora, además, judicial), pues esos, los intensos, los que se han procurado con tiempo información adicional a fin de contrastar los ruidosos titulares, esos mismos que son, sí, a qué negarlo,un tanto moscacojoneristas vocacionales.



Situarse en el polo A es cómodo, la "fe" viene dada y es una luz que te inunda sin sombra de sospecha, no hay nada que currarse, las cosas son como vienen dadas y cuando hay ruido es que el río lleva agua. Además que ellos y sobre todo ellas (ellas ni te cuento) se sienten como se sienten, (con ganas de hostiar para que no les hostien, tal vez,  porque ya se sabe que el que da primero da dos veces, y esto es una guerra preventiva) y sentir es lo que cuenta, sentir mucho, cuanto más sentimientos más certezas. El ruido de tripas acompasa al mediático y esto es una jaula de grillos, pero todos eligen estar donde más grillos haya porque ahí está la miga del mendrugo, seguramente.



Situarse en el polo B es muy incómodo: hay que buscar información, leerse tochos, contener las tripas, poner en cuarentena los impulsos y por si eso fuera poco hay que nadar contra corriente (y el río va cargadito, que no en balde suena atronadoramente) Exige además un último arrojo: asumir que te baneen o te manden a la zona hate en persona gente que hasta ayer te amaba, le daba like a tus gatitos o se tomaba un café contigo en el bar Manolo, y  lo mismo lo uno que lo otro ocurre, es sabido, aunque duela más lo del colega del barrio. Pero todo sea por encontrar la pulpa al tomate, porque cuate ahí hay tomate.



En fin, el agua y el aceite no hacen liga, además el agua es caudalosa y el aceite solo una gota en el océano. Los tiempos marcan la emocionalidad sin embridar y el raciocinio está out, knock out, abatido entre las cuerdas del ring, hostiado a tope.



Visto lo visto una se pregunta si no hará falta un poquito de nueva Ilustración o es que sobran iluminaos, sí, de esos del tipo me siento en el plató y largo fiesta pa facilitaros lo que tenéis que opinar, porque os quiero mogollón y lo hago por vuestro bien, que no se os puede dejar solos.



Mientras tanto una se sienta a la puerta no sabe si a ver pasar a su enemigo o a esperar a Godot pero en cualquier caso en vaso largo y con hielo.











SENTENCIADOS





El nazismo (ahora estoy leyendo sobre eso) desmontó el estado de derecho para instalar "tribunales del pueblo" es decir juicios sumarios, delitos de autor, etc. Pero eso sí, creó leyes ad hoc para que todo finalmente cuadrara como legal. ¿Cómo pudo suceder?, Nos preguntaremos. La propaganda y la agitación de masas fue tal que nadie opuso objeción, ni los partidos en la oposición ni los sindicatos ni gremio alguno, todos fueron cooptados o machacados. Cuando tanto se habla de memoria histórica de forma banal deberíamos refrescar la memoria de los errores del pasado para aprender algo valioso para el presente.



Un presente que asoma con muy mal cariz cuando turbas enfurecidas en las puertas de los tribunales dictan veredictos. Turbas azuzadas –asunto no menor–por los medios al unísono y con el conveniente anclaje en las instituciones del poder: en el parlamento, en el funcionariado de todo pelaje, en el ejecutivo y, claro está, también en la judicatura.



La cruz gamada pasó a la historia, de amargo recuerdo. Ahora ondean nuevas banderas, de un cierto color lila amoratado. Se disfrazan de salvadores pero vienen a por nosotros, no sólo a por ellos –los hombres– aunque por ellos hayan empezado, vienen también a por nosotras, sus compañeras, sus amigas, sus hijas o sus madres  y también a por ti, mujer lila, aunque creas que te están "salvando", para entonces ya no podrás apelar a sororidades, porque no quedará nadie, sino la fría burocracia a la que estás contribuyendo cuando pides cambios de leyes destinados a hacernos menos libres, más sujetos al poder, más y mejor dominados por él.



Una ley de consentimiento es lo que viene gestándose en estos dos últimos años de propaganda sin descanso, de agitación constante. Para que mujeres y hombres, cada vez más alejados y enfrentados, nos convirtamos todos en harapos en manos de las instituciones de poder y guiñoles de ellas.



Eso sí, todo, una vez desmontado el estado de derecho, volverá a ser legal pero con una legalidad nueva, diferente. Tan legal como lo es la ley feminista más veterana entre nosotros la Ley de Violencia de Género, 15 años  sin presunción de inocencia para el hombre que caiga bajo su rueda.



Se trataba entonces de penalizar las parejas estables, ahora se nos viene la siguiente vuelta de tuerca: prohibir (de facto) el sexo libre. Veréis que bien vamos a estar todos y todas, solos y solas y bajo permanente sospecha. ¡Qué triunfo para los que administran el poder y los negocios! Pero eso sí dirán –porque no dejáis de gritar pidiendo cadenas– que lo han pedido las masas en #manadas.









MIRAR EL CÉNTIMO




La cuenta suma 3,05. Le doy a la china un billete de 5 y cuatro céntimos que recaudo del fondo del monedero, así ella no tendrá que desprenderse de cambio y no me largará un puñado de chatarra.

-No, no –protesta– yo cambio.

Sonrío sorprendida y comento:

-Oriente es Oriente y Occidente, Occidente.

Ella devuelve, ampliada, la sonrisa y sentencia:

-Chi, chi, Oliente es Oliente y Ochidente, Ochidente, chi, chi.

Le devuelvo una moneda de 5 céntimos (de las que me ha dado) a modo de propina o, más bien,  para dejar claro que no quería robarle un céntimo y vuelve a protestar, aunque pronto la hace desaparecer en el cajón.

-Chi, chi, Oliente es Oliente y Ochidente, Ochidente, chi, chi. (Carcajada, de Fumanchú, me ha parecido)











viernes, 24 de mayo de 2019

SEPELIO DE RUBALCABA



Cuando muere un político lo mejor que pueden decir de él los medios es que era un hombre de Estado. Porque al parecer ser un hombre de Estado es algo fetén, o muy fetén, o incluso de lo más fetén, casi tanto como ser un banquero o un Bill Gates, pero sin ese aire de sospecha que envuelve a los amasadores de fortunas. La frase reverbera en todos los altavoces: “un hombre de Estado” “de Estado” “ado, ado, ado”,  y ese replicar insidioso del elogio incita a persignarse hasta a los ateos más recalcitrantes. Unos cientos de ciudadanos ociosos se prestan con gusto a ser figurantes de la Historia, personándose en el lugar del adiós definitivo, por si los enfoca Antena 3 y los inmortaliza la futura Wikipedia. Porque Pepi, qué más da, si al cortinglés podemos ir el lunes a lo más tardar, hoy donde hay que ir es al Congreso, jamía, que no todos los días muere un hombre de Estado, como tampoco la palma a diario una Duquesa  o se casa una infanta de España. Que a Leonor no se yo si llegaremos pero a este llegamos, ¡cómo que no! Ya ves, Paco, que hasta a los hombres de Estado les llega su hora. Sí, el hombre de Estado muere pero el Estado sigue, Mariló. ¡Si nos va a enterrar a todos, como mi suegra! ¿Y el himno? ¿Y las flores? ¿Y lo llevarán a hombros, supongo? ¡No empujen, oigan! ¡Pues si quieren comodidad haberse quedado en casa con la tele! ¡Uy, cuánta cámara! ¡Un hombre de Estado, ay dolor! ¡Por si te enfocan, ya sabes!






RUMORES EN LAS REDES



¿Fraude electoral? El rumor intenta abrirse paso en las redes. Y yo me pregunto ¿Es que no son siempre fraudulentas las elecciones desde el punto que suele ganar quienes tienen más y mejor aparato propagandístico? Que a algunos les parezca increíble que haya ganado Sánchez lo único que revela es que lo que  uno ve como obvio no lo es para otros, ¿O es que no ganaba con mayoría el PP aún estando hasta las cejas de corrupción y teniendo al frente a un indolente mamarracho? Pero entonces no se hablaba de fraude sino de que el electorado estaba alienado. Pero vamos a ver cuando el resultado me gusta el resultado es bueno y cuando no me gusta es que o hay fraude o proclamo alertas "anti", ¡Y se llaman "demócratas" los unos y los otros! Yo niego la mayor, el sistema es fraudulento per se, independientemente del resultado. No es sino un juego de trileros con la bendición de su santidad "mercado" y su deidad Estado que son los que mandan sí o sí o sí. Que si quieres arroz, Catalina








miércoles, 13 de marzo de 2019

ANTICAPITALISTA



Antonio Limón tuvo un hijo al que, por prudencia,  no le llamó Amarillo, sino Celeste, así fue como produjo el colapso informático de la empresa Pantone y su caída en picado en bolsa. Aunque, como no tuvo la perspicacia de patentar el invento, no se ha ganado un lugar en la historia como anticapitalista. Sin embargo su compañero de pupitre de la primaria, que hizo carrera en un sindicato, se ganó tal apodo cuando accedió al puesto de directivo en la Caja Laboral de Ahorros. Eso sí, es un amigo sincero, de los mejores, el único que le invita a marisco con la tarjeta black los primeros de mayo.








domingo, 10 de marzo de 2019

HOMBRE DECONSTRUIDO




Nací varón aunque de baja estatura y peso pluma. Me acerqué como un peregrino cualquiera a la santa y gran mujer que daba audiencia cada jueves. Le susurré una pequeña oración subordinada a modo de reverencia. Ella me miró al cabo, displicente, y concluyó, con un gesto que solicitaba mi retirada: ¡Vete y no oprimas más!

Ungido por la expiación de mi pecado, desde entonces llamo a las puertas comedidamente con los nudillos, por no oprimir el timbre como hacía antes de mi deconstrucción acelerada, la que me otorgó la señora de gran talla. Sobre ella, recuerdo,  colgaba un cartel de rima consonante en 38 cuyo sentido no capté ya que no se insinuaban las lorzas bajo la túnica amplia que envolvía su figura amorfa.

No oprimir me ha incapacitado laboralmente, yo era un hombre aferrado a un piano y ahora quizá tenga que tocar la flauta, aunque eso de tapar los agujeros con los dedos no sé cómo será calificado. El caso es que he tenido que hacer instalar un sensor en cada habitación para que la luz se encienda sin necesidad de oprimir el interruptor. Y sigo viendo Tele5 desde hace un año, porque no puedo oprimir el mando a distancia, tampoco para apagar la televisión.

Para mí la vida como ex opresor se ha vuelto difícil, como ejemplos cotidianos baste decir que  no puedo hacer una mayonesa por no oprimir la minipimer ni aporrear el teclado del ordenador. La única salida que encuentro a la baja calidad de mi existencia no opresora es casarme, sí, no puedo vivir sólo, si tuviera mujer al menos ella podría oprimir todos los botones incluido los del ascensor, así la décima planta se me haría más llevadera. Tendré que esperar a otra audiencia de jueves, no puedo elegir mujer al azar, me dejaré aconsejar no sea que todo mi sacrificio por no oprimir sea un esfuerzo realizado en vano.